Como en los tiempos en los que gobernaba el PRI y se realizaban prácticas de presidencialismo autoritario y poder absoluto, lo cual imponían reformas de corte neoliberal
y justificaban la represión a los sectores inconformes; en la actualidad podemos afirmar que efectivamente dichas prácticas se están presentando de forma más recurrente ahora con el gobierno autodenominado de la 4T.
Y es que está claro que Morena tiene una alianza con el PRI lo que hace que tengan mayoría en el poder legislativo, control total en el poder ejecutivo y poder judicial; mayoría en los gobernadores de los 32 estados del país, es decir, el gobierno efectivamente está siendo dirigido por la socialdemocracia de derecha neoliberal, resaltando su carácter represor como ya lo hemos visto con el papel de la Guardia Nacional reprimiendo a los Padres de los 43 y estudiantes de Ayotizinapa, con la hija del “Toro” como gobernadora de Morena en Guerrero; la represión en contra de los maestros de la sección XVIII-CNTE con Bedolla como Gobernador de Morena en Michoacán; la represión
que han sufrido maestros y estudiantes en Chiapas por parte de Rutilio de Morena, la imposición de la USICAMM, la imposición de la ley de pensiones, la centralización de la policía bajo el mando del ejército; el proceso de privatización de las inmobiliarias en la CDMX empujado por Sheimbaun, los pactos que hace Morena con el PAN por ejemplo en Querétaro y Tamaulipas con Cabeza de Vaca; la defensa que recientemente hizo el senado y gobernadores -todos de Morena-, en el cual exaltan un discurso nacionalista y de la patria, resaltando que AMLO “representa todo ello”.
Esto quiere decir, que el inquilino de Palacio Nacional, como dicen, es la mano que mece la cuna, y aun que dice que ya se va a ir a La Chingada (rancho de AMLO), está dejando un antecedente de centralización del poder propio del presidencialismo burgués y mayor poder al ejército con la militarización, que para nada beneficiará a los trabajadores, por el contrario, se aplica la máxima que dice: la socialdemocracia le tiende la cama al fascismo.