De cara a la guerra, en Ucrania, de los Gobiernos de Rusia, Ucrania, Estados Unidos, Europa y de todos los que se confabulan en la ONU, contra el proletariado y los pueblos de Ucrania, Rusia y de todo el mundo, los capitalistas-imperialistas y sus lacayos, quisieran hacernos creer que el mundo solo está conformado entre pronorteamericanos y prorrusos. Quisieran que olvidáramos que guerras parecidas ahora mismo, existen -calientes y frías- por todos los rincones del planeta. Quisieran que olvidáramos, que guerras como estas, condujeron inevitablemente a las I y II Guerras Mundiales imperialistas y de rapiña por el reparto del mundo.
Frente a estas guerras injustas y de rapiña la clase obrera y los pueblos del mundo, a través de su unión en la I, la II (antes de su bancarrota social patriota, social imperialista y social fascista) y la III Internacionales, bajo la dirección de Marx, Engels, Lenin y Stalin y muchos otros comunistas, revolucionarios, demócratas, progresistas y amantes de la paz y por la autodeterminación de los pueblos; tejieron las condiciones para oponernos de manera consecuente y revolucionaria para contener estas guerras y, en caso de que estallaran, convertirlas en guerras civiles o guerras justas por la transformación revolucionaria y avanzada de todo el modo de producción capitalista-imperialista.
Esta es la perspectiva, por ejemplo, de las enseñanzas de la gloriosa Comuna de París, de la Gran Revolución Socialista de octubre y de la victoria de la exURSS y el Ejército Rojo y la Internacional Comunista en la II Guerra Mundial contra el nazifascismo y todo el orden capitalista-imperialista a través de la táctica del Frente Único, que hoy es más vigente que nunca no solo en México, sino por todos los territorios del planeta.
La emancipación del proletariado y los pueblos de México, como de todo el mundo, no está en ser carne de cañón de uno u otro país o bloque capitalista-imperialista, en “apoyarnos tácticamente” en uno u otro país o bloque de países capitalistas-imperialistas para “mejorar” nuestra condición económica. Nuestra liberación, está en la unión fraternal del proletariado y los pueblos del mundo contra las guerras de rapiña, contra el fascismo, contra todo el sistema capitalista imperialista y por la victoria de las revolución proletaria en cada uno de nuestros países y a nivel mundial.
Así está la lucha de clases por estos días.