La conferencia conjunta entre Andrés Manuel López Obrador – Enrique Peña Nieto (AMLO-EPN) y sus respectivos equipos de trabajo, en torno a liberación de Elba Esther Gordillo Morales, ratifica por enésima vez, que todas las fracciones burguesas han construido con celeridad un pacto mucho más profundo que el mismo ¨Pacto por México¨, con el cual intentaran calmar las aguas de la lucha de clases, contener los avances de la tendencia por la revolución proletaria y desarrollar a nuevos niveles las fuerzas productivas y el sistema capitalista-imperialista a través de una mayor explotación, depauperación y deshumanización del proletariado y los pueblos de México.
Pero los acuerdos de alcoba entre AMLO-EPN no van a impedir que tarde o temprano afloren de manera radical las contradicciones interburguesas por el reparto de la ganancia y mucho menos que sigan desarrollándose las 4 grandes contradicciones de nuestra época del imperialismo y las revoluciones proletarias: capital-trabajo; inter e intra imperialistas; imperialistas-pueblos explotados y oprimidos; capitalismo-socialismo.
Nuestras demandas esenciales e inmediatas siguen sin resolverse y en ese sentido, nuestro programa y nuestras tareas populares-revolucionarias, siguen siendo vigentes y urgentes. Nuestros combates, siguen… siguen…siguen… y… siguen… siguen… siguen…
Ahora mismo hay un conjunto de tareas práctica y concretas en las que tenemos que concentrarnos para superar el estado de expectativa pasiva frente a la ¨nueva transición¨ y nuestra propia euforia por haber echado del gobierno del sector I de la economía que ha llevado al extremo la vulneración de nuestras condiciones de vida y de trabajo.
Consolidación del proceso de frente único de todo el pueblo por la revolución proletaria, sigue siendo estrategia y táctica y arma de la crítica para pasar a la crítica de las armas por la victoria de la revolución socialista en México.
Así está la lucha de clases por estos días.