A pesar de las manifestaciones, de los llamados de organismos internacionales como la ONU, la CIDH; el gobierno ha demostrado que anteponen los intereses de los grandes empresarios (burgueses) por sobre el proletariado y los pueblos de México.
Es un hecho que la LSI criminaliza la protesta social, legaliza la utilización del ejército y la marina para reprimir la protesta social.
¿Qué hacer?
Hoy más que nunca, la rabia y el dolor se debe transformar en organización y lucha, preparémonos para tiempos difíciles, nuestro pueblo siempre lo ha hecho.