En días pasados realizamos la V Conferencia Nacional Ordinaria del Partido Comunista de México (marxista-leninista) «PC de M (m-l)» evento que refrendó el Centralismo Democrático que rige en nuestra organización, como su disposición al combate por la revolución socialista, la dictadura del proletariado, el socialismo y el comunismo, que nos legaran Marx, Engels, Lenin y Stalin.
Delegados de diferentes estados del país, acudimos a presentar nuestras conclusiones colectivas de una agenda y ruta de discusión central que realizamos durante varios meses, donde todas las estructuras organizativas participaron, donde todos los militantes se expresaron para fortalecer y enriquecer, nuestra línea política trazada desde el 6° Congreso Nacional Ordinario.
Este evento, fue previo al 7° Congreso Nacional Ordinario, que en fechas próximas realizaremos, como lo marcan nuestros Estatutos y de acuerdo a las condiciones políticas del país. Mismo que es base para la discusión y orientaciones para de este próximo Congreso.
Esta Conferencia refrendo en lo fundamental la línea política de nuestro PC de M (m-l), esto es, ratificamos por su vigencia la Declaración de Principio, el Programa y los Estatutos, sobre la base de la situación actual de la lucha de clases a nivel mundial y nacional. Sobre las tesis marxista-leninistas, de la lucha de clase como motor de la historia, del papel de la clase obrera como sujeto revolucionario y su Partido de vanguardia, de la revolución socialista, la dictadura del proletariado, del socialismo y el comunismo científicos, mantuvimos las tendencias siguientes: en la economía mundial capitalista-imperialista, se mantienen las secuelas de la crisis económica de 2007-2008, que han dado una baja y débil recuperación, y un lento crecimiento, del mundo capitalista imperialista moribundo y descompuesto, derivado de la decreciente tasa de la ganancia; la fascistización a nivel mundial, ahora encabezada por Donald Trump; las pugnas interimperialistas se agudizan manteniendo y creando conflictos que ponen en peligro de una guerra al planeta. Que el neoliberalismo se ha agotado y ahora los capitalistas buscan establecer un nuevo modelo de acumulación de capital, que les haga resarcir sus ganancias, descargando en la clase obrera y los proletarios del mundo esta nueva situación. Que los gobiernos “progresistas” de América Latina, ya dieron de si y que las masas proletarias, los revolucionarios y marxista-leninistas, se movilizan planteándose retos y tareas que fortalezcan sus luchas, más allá de las reivindicaciones inmediatas. Que los Partidos marxista leninistas en sus países avancen y fortalezcan la Conferencia Internacional de Partidos y Organizaciones Marxista Leninistas, que profundizando su unidad política, ideológica y organizativa, desde las iniciativas internacionales de la juventud, las mujeres, los sindicatos, los seminarios y otros; que también contribuyamos a desarrollar el frente antiimperialista y antifascista mundial, como lo hacemos hoy con la Liga Internacional de la Lucha de los Pueblos para detener la agresión a los pueblos de sus enemigos de clase.
Que nuestro país, eslabón de la cadena imperialista, se desarrolla sobre estas mismas tendencias mundiales con sus particularidades: refuerza su papel dependiente del imperialismo estadounidense y con la disputa con China por sus inversiones en el país. Un estancamiento económico durante este periodo neoliberal y la tendencia a la baja en la tasa de ganancia, con perfil hacia una crisis económica más cruenta. Que la llegada de López Obrador y Morena al gobierno, se da por la inconformidad popular y el pacto entre las burguesías del sector I y II de la economía para poner bajo control al nuevo gobierno de la segunda, pactando una transición que entre otra cosas, desmovilice y controle la lucha de las masas proletarias. Que en este sentido nuestra táctica, sigue siendo aclarar a las masas el nuevo periodo que se presenta, es de cambios de forma para beneficio de la oligarquía financiera y que la clase obrera y el pueblo deben seguir confiando en su propia fuerza e independencia de clase, para profundizar la lucha contra estos, desarrollando el Frente Único, a través de la Asamblea del Proletariado y los Pueblos de México, que organice una Huelga Política General, que establezca una nueva Constituyente y nueva Constitución Política, como parte de la acumulación de fuerzas para la revolución socialista y la dictadura del proletariado, que hagan de México un país socialista y comunista.