Los pasados días 29 y 30 de junio grupos de jubilados exigieron el pago de su pensión donde las bases acudieron al llamado de convocatorias espontáneas difundidas por redes sociales para manifestar la inconformidad, ya que el pago de asistencia a actos cívicos en días festivos ($ 2, 978.48) de acuerdo al convenio 2022, no se vio reflejado en el salario de los 107 mil docentes, (en el caso de los burócratas tampoco recibieron 10 días de sueldo), aun cuando el presupuesto fue aprobado en diciembre de 2021 por la Cámara de Diputados, lo que es indicativo del mal manejo de las finanzas del gobierno priista saliente de Alfredo del Mazo, graduado en estafas maestras que no se olvidan (cuando fue titular del Banco Nacional de Obras, trianguló millones de pesos para beneficio personal y favoreció los intereses primordialmente del empresariado).
El Sindicato de Maestros al Servicio del Estado de México (SMSEM) fue creado en 1952 como un instrumento de lucha en ese momento, por los bajos salarios, la falta de apoyos por parte del gobierno y despidos injustificados. Ese objetivo se fue disolviendo por las dirigencias sindicales ante los beneficios personales que les ha proporcionado por la cercanía con las esferas del poder convirtiéndose en verdaderos “charrazos” sindicales traidores a la base magisterial, que solo se han dedicado sumisamente a recibir las migajas que el gobierno quiere dar en la negociación salarial anual, manteniendo al magisterio con malas condiciones de trabajo, en la precariedad y en el control político atado al priismo.
Han pasado 20 secretarios generales, que han utilizado ese cargo como un trampolín político y al término de su gestión se colocan en el PRI, el gobierno o las legislaturas estatales y federal.
Durante años el magisterio ha estado controlado, sumiso y temeroso por las amenazas, condicionamientos o represalias, sin embargo en diferentes momentos han existido brotes de inconformidad que han sido importantes como en los 70´s, “el movimiento 30-30”, 2012 contra la reforma educativa peñista, 2018 contra la iniciativa de ley del ISSEMYM-de Del Mazo, en 2020-2022 exigiendo auditoria al ISSEMYM así como por la reforma a los artículos 70 y 133 del ISSEMYM.
El enojo del magisterio por la falta de la colateral fue la gota que derramó el vaso, que se venía acumulando por los bajos salarios, la inestabilidad laboral, la pérdida de derechos laborales, el pésimo servicio de salud del ISSEMYM, carga extrema de trabajo, la implementación de la punitiva reforma educativa peñista avalada por la dirigencia del SMSEM en los periodos de Héctor Ulises Castro Gonzaga (2012-2015 ahora Director General de Fortalecimiento Académico de la EMS) y Abraham Saroné Campos (2015-2018) el hoy flamante diputado local por Morena), que en lugar de rechazar la reforma, cínicamente implementaron cursos para que los docentes realizaran el examen de permanencia.
Durante la pandemia ya siendo secretario José Manuel Uribe Navarrete, no exigió al gobierno que proporcionara los medios tecnológicos y de salud para realizar el trabajo desde casa, provocando un considerable aumento de gastos para los docentes y altos riesgos en la salud que derivó en un número considerable de decesos de maestros. Tampoco se informó el fin que tuvieron los fondos que otorga el gobierno para celebrar días festivos que no se ejercieron durante 3 años bajo el pretexto de la pandemia.
La dirigencia sindical ha sido cómplice de la quiebra del ISSEMYM ya que los 2 representantes del SMSEM ante el instituto, han aprobado las medidas privatizadoras que han quebrantado las finanzas y el servicio de salud.
En las recientes elecciones para gobernador del Estado de México la inconformidad del magisterio se expresó en las urnas con el voto de castigo contra el PRI, que perdió, no solo la elección, sino, el poder en el Estado más importante del país por el número de población y su capacidad productiva.
Para el Gobierno de Del Mazo que pensó tener controlado al magisterio por el charro en turno, Marco Aurelio Carbajal Leyva, fue sorpresiva la reacción del magisterio que bloqueó las principales autopistas, carreteras y avenidas del Valle de Toluca y de México demostrando la fuerza de uno de los sindicato más grandes del país, obligando al gobierno por la presión ejercida, a pagar de inmediato los días cívicos. Demostrando una vez más que las acciones de las masas hacen la historia.
Es importante para este proceso de lucha estar atentos a quiénes y cómo participan ya que por la experiencia dentro de los movimientos sociales surgen oportunistas, neo charros, arribistas, provocadores, que quieren colocarse al frente del movimiento con la intención de desviarlo de sus objetivos, mediatizarlo o traicionarlo a cambio de un nuevo cargo, como Abraham Saroné Campos, expriista que en sus antecedentes tenía una demanda por abuso sexual hecho que no le importó al Senador Higinio Martínez imponiéndolo como diputado en las pasadas elecciones. Así logró ocupar su curul a cambio de votos para Morena y fidelidad al Grupo de Acción Política (GAP), además uno de los operadores de las convocatorias anónimas para el cierre de avenidas junto con su antiguo grupo “Juventud Magisterial” y María Guadalupe Hernández Sánchez (que se asume como “representante del magisterio”) que tiene relación estrecha con Saroné y que ante el arribo de la futura Gobernadora Delfina Gómez, busca ser postulado en la estructura de gobierno como Secretario de Educación.
En situación similar esta la diputada por el PT Trinidad Franco Arpero, expriista que en su periodo de secretaria del SMSEM aceptó los cambios a la Ley del ISSEMYM que afectaron a los derechohabientes, hoy trata de acaballar el movimiento ofreciendo a maestros asesoría legal y política.
La importancia y trascendencia de este movimiento es que una gran mayoría de maestros acudieron por su convicción en defensa de sus derechos. A través de la movilización se resolvió esta demanda, el magisterio tiene que mantener la lucha organizadamente para mejorar las condiciones laborales, apoyándose en sus propias fuerzas, bajo los objetivos que defina democráticamente la base magisterial.
Como tarea importante corresponde democratizar al SMSEM como un sindicato de clase que defienda los intereses de sus agremiados, que piense en la transformación de la educación y del sistema económico y político del país en contra del capitalismo culpable de los males que nos aquejan. Por lo que se debe pelear la dirigencia del SMSEM para barrer las huestes priistas que aún están enquistadas en el sindicato. En este momento además de darle seguimiento a los acuerdos firmados para su cumplimiento, debemos organizarnos por regiones nombrando democráticamente a una representación autentica, que convoque a asambleas donde se discutan, analicen y se propongan alternativas sobre los problemas magisteriales como son, el USICAM, la capacitación docente, derechos laborales, ISSEMYM, regresar a las pensiones, aumento salarial, elección sindical democrática, reforma a los Estatutos del SMSEM, el equipamiento a las escuelas, entre otras necesidades integrándolas en un pliego de demandas para presentarlo a la próxima gobernadora, a las autoridades correspondientes y sea nuestra bandera de lucha.
Buscando en todo momento la unidad con los diversos procesos que se construyen en el país en defensa de los intereses y derechos populares, hacia el camino de una gran Asamblea Nacional del Proletariado y los Pueblos de México que lleve a un cambio profundo en las estructuras económicas y políticas, donde las masas trabajadoras de todos los sectores sean beneficiadas por su trabajo y gobiernen los obreros, campesinos pobres y sectores populares.
Unión de Trabajadores de la Educación del Estado de México-UTE
Partido Comunista de México (Marxista-Leninista)