Regidores del municipio de Oaxaca de Juárez en noviembre del año pasado aprobaron por mayoría la Ley de Ingresos 2020, donde la instalación de parquímetros es un tema considerado con el fin de recabar recursos para las arcas municipales.
El principal promotor de esta iniciativa es el presidente municipal de extracción morenista Oswaldo García Jarquín, quien ha asegura- do que el proyecto “se realizará basado en la legalidad, bien planeado, moderno y transparente”. Al momento la información que ha corrido es que la administración del negocio de los parquímetros será a través de los empresarios Alberto Martínez Tiburcio, Abraham Paz y Jorge Castillo, mismos que en épocas priístas y durante el mandato de Gabino Cué incrementaron sus finanzas personales. Según el presidente municipal, se tiene proyectado iniciar con 1000 cajones de estacionamiento en el centro de la ciudad y la Colonia Reforma para más adelante ampliarlo a las colonias vecinas. El costo por hora sería de 8 pesos. La instalación de parquímetros en Oaxaca no es un tema nuevo, en el 2006 a mandato del represor Ulises Ruiz Ortiz se instalaron en el centro de la ciudad aparatos automáticos para el cobró de estacionamiento en público; este hecho generó la organización de un frente común de resistencia y en defensa de los derechos ciudadanos. En ese mismo año, el magisterio, organizaciones sociales y trabaja- dores del centro de la ciudad de manera organizada quitaron los parquímetros pues fue una imposición la privatización de las calles de la ciudad.
Contrario al discurso oficial, el equipo del presidente municipal pretende revivir una vieja iniciativa priista que solo beneficia a un sector de los empresarios quienes administrarían el negocio mientras que los asalariados que laboran en el centro de la ciudad, personas que acuden al centro y turistas se- rían los mayormente afectados. En dichos del edil capitalino, los parquímetros se instalarían a partir de enero. En este año que comienza es necesario ver con claridad cuáles iniciativas afectan y cuáles benefician los bolsillos de los trabajadores, por ello esta iniciativa de instalación de parquímetros no debe hacerse realidad; debemos recuperar la organización popular para contrarrestar este tipo de iniciativas que son lesivas.