Las personas con discapacidad, son aquellas personas en condiciones particulares presentan cierta deficiencia o limitaciones (el concepto puede ser un poco incómodo) físicas, intelectuales o sensoriales, como: física o motriz, orgánica o visceral, sensorial (auditiva y visual), psíquica (intelectual, psicosocial); las causas pueden ser sociales y/o contextuales, sanitarias y ambientales.
Pese a esa dimensión del problema, la oligarquía financiera y sus gobiernos de ayer y ahora no han tenido y no tienen el interés siquiera de atenderlo y más bien por la presión social lo hacen. Dada la naturaleza deshumanizante del capitalismo, la oligarquía se ve obligada a disponer recursos mínimos desde el Estado para simular su preocupación por el problema; si con las personas que no tienen discapacidad alguna hay trato inhumano, con las que si lo tienen eso es peor, porque para ellos es mejor no gastar.
De acuerdo con el Censo de Población y Vivienda 2020, en México hay 6, 179, 890 personas con algún tipo de discapacidad, lo que representa 4.9% de la población total del país. De ellas 53% son mujeres y 47 % son hombres.
Según la Organización Mundial de la Salud al 2020, más de mil millones de personas viven en todo el mundo con algún tipo de discapacidad, aproximadamente el 15% de la población mundial; de ellas, casi 190 millones tienen dificultades en su funcionamiento y requieren con frecuencia servicios de asistencia.
Michoacán, es el sexto estado con más personas discapacitadas en el país. En la entidad se encuentra la cantidad de 826 874 personas el 17.4% de la población total. La Ley para la Inclusión de las Personas con Discapacidad en Michoacán publicada en el 2014 no se cumple, debido a que el Artículo 52 señala claramente que los tres poderes del Estado, los organismos autónomos y los municipios tienen que dotar a los edificios públicos, así como las instalaciones abiertas al público de señalización en Braille y en su caso en formatos de fácil lectura y comprensión, entre otras muchas cosas como accesos, material didáctico especial, medicamentos, atención especializada.
Tenemos un gobierno que no tiene planes suficientes para resolver y ayudar en la situación de este sector social marginado y discriminado que cada
día aumentan más, como no son una fuerza de trabajo eficiente para los capitalistas prefieren no invertir en ellos. Necesitamos solidarízanos con ellos y apoyarlos para que resuelvan sus necesidades inmediatas de acuerdo a un plan de lucha general, tomarlos en cuanta, a ellos y sus familias, no discriminarlos y no dejarlos en el olvido y entender que nuestros intereses de clase se hermanan con ellos porque para el capitalismo son inútiles, y más bien es una situación urgente que el movimiento organizado debe reivindicar y exigir la atención efectiva del Estado. Algunos esfuerzos del magisterio michoacano y del sector salud se ven opacados por la división sindicalista, producto de la influencia de diferentes gobiernos incluido el actual para contener el movimiento popular, situación que debemos contribuir que no siga así.