Los tiempos políticos no los determina un calendario electoral, sino las necesidades de correlación de fuerzas entre las clases y sectores de las clases sociales; eso explica los adelantos en la conformación de los diversos bloques de la burguesía en nuestro país, que enfilan sus alianzas y amarres, para alcanzar una nueva correlación de fuerzas hacia las elecciones 2021 en el forcejeo por: 500 diputados a la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, 15 gobernadores y 29 legislaturas locales y un número importante de municipios.
Los fundamentos de la conformación de las alianzas políticas de la burguesía no están en los principios ideológicos, sino en las necesidades de acumulación de capital del Sector I y Sector II de la economía capitalista, por lo tanto, lo que ahora estamos observando, no son contradicciones entre conservadores y liberales, son contradicciones interburguesas e interoligárquicas las que se expresan en la constitución de los dos bloques electorales que hoy se están configurando.
El Bloque Opositor Amplio (BOA)-Frente Nacional Anti-AMLO (FRENAA), representa los intereses del sector de la burguesía productora de medios de producción y artículos de lujo (Sector I de la economía); y tiene como programa político, la imposición del fascismo en nuestro país, para aplastar a sangre y fuego las aspiraciones democráticas y por mejores condiciones de vida, de trabajo y estudio de la clase obrera y los pueblos de México, la alianza subordinada del capital y el mercado nacionales a los diversos países imperialistas, principalmente, al norteamericano. En este bloque se expresan las posiciones ideológicas más retrógradas de la oligarquía financiera, en donde se aglutina la derecha y la ultraderecha, quienes esencialmente habían mantenido la dirección del Estado mexicano por casi 40 años de lo que va, del periodo neoliberal; el PRI el PAN, el PRD en su momento, fueron las principales expresiones electorales de esta tendencia burguesa. Ahora las cámaras empresariales y las organizaciones patronales como el Consejo Coordinador Empresarial (CCE), la Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX), están retomando de manera directa el quehacer político de este sector de la oligarquía mexicana.
En contraparte y como expresión política del Sector II de la economía (productores de los bienes de consumo popular), están la autodenominada Cuarta Transformación (4ªT), encabezados por el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, que, de cara a las elecciones del 2021 han anunciado en los últimos días, la conformación de la alianza integrada por el Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), el Partido del Trabajo (PT) y el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), cuyo programa político es el programa de continuidad neoliberal (ahora denominado postneoliberal), de la 4ªT, basado en un desarrollo forzado y violento del proceso de acumulación de capital, ampliando el mercado interno, mediante grandes megaproyectos, acelerando el desarrollo capitalista –y por lo mismo una mayor proletarización- en todo el sur-sureste del país. Para ello están buscando una diversificación de la inversión extranjera, a pesar de que aún sea mayoritaria y determinante la subordinación del desarrollo del capitalismo en México al imperialismo norteamericano. Estos intereses de acumulación capitalista, lo encubren con un discurso populista, entremezclando posiciones socialdemócratas y hasta reformistas en algunos casos, pero siempre leales a los intereses oligárquicos que representan. Con ello, esperan convencer por un lado al proletariado y a los campesinos pobres, de que representan sus intereses, combatiendo a la corrupción, y, por otro lado, en los hechos, están creando condiciones para escalar un nuevo y más alto nivel de explotación de la clase obrera mexicana y la naturaleza. De esta manera, quieren pasar las consignas, demandas y programa de “Nueva Política Económica” del Sector II de la economía capitalista, como si fueran de las propias masas populares, como por ejemplo el combate a la corrupción cuyo objetivo central es legitimar a las instituciones y la explotación y opresión de la burguesía, frente a las masas populares. Hoy MORENA y sus nuevos satélites: PT y PVEM, pretenden perfilarse hacia su conversión en el Partido único de la oligarquía financiera y toda la burguesía en el país, por eso anidan también en su seno y en sus alianzas personajes a todas luces ultraderechistas y con posiciones retrogradas.
Ambas facciones electoreras, influirán en las definiciones, comportamiento y suerte de los partidos con nuevo registro electoral.
De esta manera engañosa, el proletariado, los campesinos pobres y los pueblos de México, tenemos enfrente, dos alternativas de esencia burguesa-capitalista, que tienen contradicciones –aparentemente hasta antagónicas- al representar por separado a cada uno de los dos sectores de la economía capitalista en México, pero en conjunto a toda la formación social y modo de producción capitalista-imperialista, pues comparten la esencia de clase (véase por ejemplo la elección de México en el Consejo de Seguridad y el Consejo Económico y Social de la ONU). Frente a la crisis económica tan profunda en que está entrando el sistema capitalista-imperialista mundial, ambas facciones, buscan contener la tendencia decreciente de la tasa de ganancia; ambas facciones, buscan revitalizar el proceso de acumulación capitalista en nuestro país a través de la mayor explotación de la fuerza de trabajo y, haciendo recaer todo el peso de la crisis sobre la humanidad de los trabajadores, sobre los pueblos y sobre la naturaleza.
Para la clase obrera y los pueblos de México, ninguna alternativa oligárquica-burguesa representan el camino para nuestra emancipación y liberación. ¡Ahora es por la Revolución Proletaria!
La verdadera contraparte a las diversas facciones burguesas y oligárquicas (a pesar de que se sigan profundizando momentáneamente sus contradicciones entre estas), está en la lucha de clases del proletariado, en su programa y proyecto alternativo de nación y sociedad revolucionario socialista-comunista que construye colectivamente con los campesinos pobres, con las amplias masas populares explotadas y oprimidas por el capital y con los pueblos de México y el mundo. Lo nuevo que ha de sustituir el sistema capitalista actual, no está ni en fortalecer el proyecto engañoso de la 4ªT, ni mucho menos en la alternativa fascista de BOA-FRENAA, está, en seguir construyendo, calificando y cualificado el proceso de acumulación revolucionaria de fuerzas (del que incluso la 4ªT se ha aprovechado), seguir forjando el Frente Único en forma de Asamblea Nacional del Proletariado y los Pueblos de México, que ponga en alto las banderas democráticas, antifascistas y antiimperialista en la forma de Asamblea Nacional del Proletariado y los Pueblos de México, crecer y cualificar nuestras formas de lucha y organización en la lucha callejera, las huelgas, los paros, las demostraciones hacia la Huelga Política General, construyendo nuestro poder soviético de masas, porque somos las masas, las hacedoras de la historia. Es esta nuestra alternativa, es este nuestro único camino cierto y seguro, es decir: construir, organizar y planificar colectivamente, nuestra intervención consciente y creativa en la Revolución Proletaria en México y en el mundo.
Los vientos de lucha proletaria-popular, están soplando cada día más fuerte, la lucha por la vida, por el pan, por la salud, por el trabajo y por la justicia, que está activándose por todo el país como pequeños ventarrones, son partes constituyentes de este nuevo periodo de ascenso de la lucha de clases del proletariado, sin duda son esas las corrientes de aire que poco a poco irán convirtiéndose en grandes tormentas revolucionarias; y una primera ola de tormenta revolucionaria deberá soplar hacia el 2021 y sólo así podemos decir con certeza que pueden florecer las aspiraciones democráticas-revolucionarias de la clase obrera y sus aliados tácticos y estratégicos frente a ese lodazal en el que se han convertido las elecciones burguesas.
Fraternalmente
¡Proletarios de todos los países, uníos!
Partido Comunista de México (marxista-leninista)
Frente Popular Revolucionario
Unión de la Juventud Revolucionaria de México
Junio del 2020.