El 19 de junio de 2016 las fuerzas policiacas federales y estatales con la anuencia de Enrique Peña Nieto, Osorio Chong, Aurelio Nuño y Gabino Cué con plomo decidieron reprimir la resistencia magisterial –popular que mantenía una barricada en la autopista a la altura de Asunción Nochixtlán; ese día culminaban una serie de operativos que pretendía desactivar a sangre y fuego las manifestaciones contra la mal llamada reforma educativa.
La batalla contra la reforma educativa se coronaba como la culminación de los proyectos estratégicos que los organismos internacionales, el imperialismo y los empresarios nacionales ordenaron imponer en las más de 16 reformas estructurales a la Constitución de 1917 que hasta hoy se mantiene vigente.
La mañana del 19 de junio las balas y el gas lacrimógeno fueron utilizados contra toda la población sin distinción alguna, la fuerza del Estado temerosa y disminuida intentó hacer de Nochixtlán un esca
rmiento a las voces disidentes; 8 asesinados y muchos heridos fueron los saldos de aquel entonces.
En la actualidad y con 3 años de distancia, aún no existe la justicia, el caso se encuentra en los juzgados federales en donde el ministerio público por momentos se ha negado a tomarles declaración a Peña Nieto, Osorio Chong, Aurelio Nuño y Gabino Cue; es indispensable encontrar la verdad con justicia, identificar a los responsables que dieron la orden para cometer tal crimen de lesa humanidad.
Que luchar por la justicia no nos cueste la vida y que exigir justicia no quede como palabras en el viento; en necesario investigar y castigar a los represores materiales e intelectuales; para el actual gobierno se presenta una oportunidad de reivindicarse y hacer justicia para las víctimas de Nochixtlán, no solo se trata del resarcimiento del daño, de no enjuiciar a los criminales sería una clara muestra de que han preferido negociar con los poderosos antes que hacer justicia.
La lucha por justicia debe continuar y a través de la organización popular es como la hemos de conseguir, preparándonos para las nuevas batallas que están por venir, teniendo claridad que la lucha de clases se mantiene vigente y que el cambio de gobierno no significa el fin de la explotación o el fin de la miseria, eliminar la desigualdad y las clases sociales solo se podrá hacer derrocando el sistema capitalista.
¡Nochixtlán vive, la lucha sigue!
¡Unidad de todo el pueblo por la emancipación proletaria!
¡Proletarios de todos los países, uníos!
Frente Popular Revolucionario
Partido Comunista de México (marxista-leninista)