La inflación en los productos de la canasta básica se ha disparado, el precio estándar por poner algunos ejemplos ha subido: kilo de huevo en el año 2018 $ 24. 00, en el 2023: $ 54.00; kilo de tortilla en el año 2018: $ 12.00, en el 2023: $ 24.00. Kilo de carne en el año 2018: $ 90.00 a $120.00, en el 2023: $ 160-$ 220.00. Kilo de Arroz en el año 2018: $ 22.00, en el 2023: $ 45.00. Lo anterior evidencia que en el autodenominado régimen de la Cuarta Transformación hay continuidad neoliberal, y por mucho que digan en las mañaneras que hay “crecimiento económico” y que “los salarios han aumentado”, la realidad de los trabajadores del campo y la ciudad, es que sigue en malas condiciones de vida y trabajo.
Ante esta tendencia de incremento de los productos de la canasta básica, la respuesta debe ser la pelea callejera; preparar una contundente Jornada Nacional de Lucha para el 1 Mayo en el marco del Día Internacional del Trabajo, preparar la movilización unitarias, con demandas que acuerpen a las amplias masas populares; salir en los 32 estados y más de 2, 400 municipios, organizaciones sociales, campesinos, sindicatos, estudiantes, artistas, ecologistas, avanzar en la construcción práctica y concreta de la Asamblea Nacional del Proletariado y los Pueblos de México.
Demandas como: justicia para los 43 estudiantes de Ayotzinapa, abajo la reforma educativa de Peña-AMLO, por Pan-Salud-Trabajo- Que la crisis la pagues los ricos, la autodenominada 4T es de continuidad de neoliberal, son necesarias levantar.
Por ello es indispensable fortalecer los instrumentos que pueden ser palancas para volcar a las amplias masas populares como el Frente Amplio Social Unitario (FASU), Unión Nacional de Trabajadores (UNT), Encuentro Nacional de Dirigentes, Conferencia Nacional de las Resistencias.