Los conceptos de izquierda y derecha se remontan a la época de la revolución burguesa, por un lado, los jacobinos encarnaron a los primeros, y por el otro, los girondinos a los segundos.

     Los jacobinos estaban a favor del cambio de régimen, es decir pugnaban por el capitalismo, y los girondinos tenían una posición recalcitrante de mantener los vestigios del feudalismo.

     Los capitalistas en apogeo durante las revoluciones burguesas asumieron la bandera ideológica del liberalismo para defender la producción de mercancías sin restricciones, así como la libertad, igualdad y fraternidad, es decir, la libertad de explotar fuerza de trabajo y extraer plusvalía al proletariado, la igualdad jurídica para los obreros que al no poseer medios de producción son presas de la esclavitud asalariada y la fraternidad con otros capitalistas para prohibir las coaliciones, sindicatos y partidos independientes de la clase obrera, y si realizan paros, huelgas, bloqueos, tomas, etc., son reprimidos, desaparecidos, encarcelados y asesinados.

     La burguesía se torna conservadora y reaccionaria cuando el proletariado adquiere independencia política e ideológica, o dicho de otra manera, los proletarios se convierten en la clase revolucionaria por excelencia porque no cambia una forma de explotación y opresión por otras, al contrario, con su revolución erradica toda explotación y opresión, bajo la senda de la revolución proletaria, la dictadura del proletariado, el socialismo proletario y el comunismo científico.  

     El marxismo-leninismo reivindica la izquierda, pero no el izquierdismo, en otras palabras, la izquierda se retoma por cuestiones tácticas para abonar al proceso de acumulación de fuerzas, considerando que debemos usar esa consigna para atraer a la pequeña burguesía, el semiproletariado y al campesinado pobre de tal modo que abracen la causa del proletariado y así aislar a la derecha que encarna el sector más recalcitrante de la burguesía en colaboración con los fascistas e imperialistas. En cambio, el izquierdismo, es una tendencia burguesa dentro del movimiento revolucionario que no toma en cuenta la situación concreta de la lucha de clases, la acumulación de fuerzas, la experiencia, el nivel de organización del proletariado para la revolución y quieren dar saltos al proceso, llevando al aventurerismo la lucha que termina en fracaso.  

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Por PCMML

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